20 de noviembre de 2009

La música del mundo.

La música nos abre la mente y el corazón a una inmensa cantidad de sentimientos y emociones. La educación musical desde la infancia, entre muchas otras cosas mejora el aprendizaje de lectura, idiomas, matemáticas, etc.
Estimular a los niños/as esa capacidad de sentir cosas, que solo la música transmite, y que a su vez esas cosas les despiertan otra infinidad de sensaciones, es un acto casi necesario. Por ello le pedí a Airana Salazar profesora de piano del Centro Cultural Carlos Cano de La Zubia que nos hablara de los beneficios que la música puede tener sobre los niños/as.
Gracias Airana por tu contribución a este blog.

La música del mundo.
Afortunadamente, pocas cosas como ella, han evolucionado y acompañado tan fielmente al hombre desde su existencia como ser humano.
La música es un arte, un ente vivo que desde siempre ha sido un gran apoyo moral, espiritual y social, y ha permitido al hombre expresar sus más sinceros sentimientos, inconformidades y modernidades parejas a su siglo.
Así bien, podríamos quedarnos en pensar que la música no es más que una sucesión de notas, pero es más enriquecedor saber que hay algo más profundo, algo que nos toca la fibra sensible y que logra trasformar a las personas.
No cabe decir, que todo aquél que se asoma al abismo del aprendizaje musical nota un cambio, recupera la ilusión infantil, se abre a un mundo nuevo que es un idioma mundial igualitario para todos, sin importar cualquier otra superficialidad que queda a flor de piel.
Pensemos pues en los niños, esas maravillas "esponjosas" mentales que absorven todo aquello que los rodea. Muchos padres, cuando introducen a sus hijos en enseñanzas y los inician en la práctica de un instrumento, no son del todo conscientes de la multitud de beneficios que estos pequeños van a interiorizar.
En un principio haciéndonos eco de la conocida frase: "la música amansa a las fieras", y sin ánimo de comparaciones, el joven que se sienta ante un instrumento tiende a tranquilizarse, pues de pronto, su intelecto se ve concentrado en hacer varias cosas a la vez. La interpretación musical en un instrumento le permite adentrarse en ese prohibido mundo interior al que nadie más puede acceder, y a través de la música, expresarse libremente dejando fluir sus sentimientos sin miedo al que dirán los demás.
La música es compartir, es aprender con y de los demás, así el niño aprende a sociabilizarse en un entorno diferente al colegio, haciendo amistades nuevas que persiguen los mismos objetivos, permitiéndose hacer grupos musicales; conjuntos de niños que se reúnen por el simple placer de tocar música juntos.
El niño que estudia música aprende a valorar, a apreciar el trabajo tanto suyo como de los demás, el estudio y el sacrificio que conlleva sacar adelante otra asignatura más, que les roba tiempo de ocio y les quita horas del día. Pero no nos confundamos, no todo es un tremendo esfuerzo y malos ratos, desde luego hay grandes recompensas, y no hay nada mejor que cuando llegan a clase con la cara de satisfacción y dicen: " que bien suena la lección, seño" . Felicidad por haber conseguido aquello que les gusta.
Después del estudio de una obra, el niño ha desarrollado en gran medida su memoria; en los casos de los pianistas, su cerebro evoluciona al trabajar simultáneamente mayor parte de sus dos hemisferios; aumentan su imaginación, pues cada obra musical es un cuento imaginario a interpretar; aprenden cosas nuevas, conceptos, se ríen, hablan en clase y crece su autoestima y confianza en los demás cuando tocan juntos y en ellos mismos sobre todo, pues llegan a la maravillosa conclusión de que son tan capaces como los demás.
Son tantas las cosas que se podrían añadir que faltaría espacio, pero me queda el placer de invitarles a que lo prueben ustedes mismos. La música es un magnífico mundo que no entiende de edad, sexo o color, cualquiera puede acercarse a conocer este arte que nos viene acompañando desde que nacimos hace miles de años.

Permitámonos parar el tiempo por un momento y preguntarnos: ¿qué sería de la vida sin un poco de música?...

Airana Salazar Ruano
Profesora de piano
 Centro Cultural Carlos Cano

3 comentarios:

  1. Me parece que toca todos los sentidos, el alma y los sonidos sin haberlos escuchado.

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  2. Magnífica síntesis del alma de la música....sin palabras.Enhorabuena.

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  3. La música, el tocar un instrumento mejor o peor eso no importa mucho, es algo que todas las personas debieran experimentar alguna vez, cuanto antes en edad mejor aun; sólo así se puede entender la maravilla que encierra entre sus "garabatos"

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AMPA EL CASTILLO